LA FLOR DE LA BONDAD

Mi duro corazón las piedras choca;
hirvientes nubes de agria arena vuelan;
mi mala fuerza me hunde y me trastoca;
llorando mi alma sufre y se desvela.

Si cántaros de fé bebiera orando
se iría mi temor, ¡ay!, a la vida;
mas soy debil bebé que anda llorando
en busca de una madre a por comida.

De pronto en el recuerdo me aparecen
Nimai Pandit, Sacimata y Vishnupriya.
¡Qué dulce eran sus tratos, qué poesía!

La flor de la bondad en mi alma crece,
mi helado corazón se despabila;
lo ablanda Madre Saci en su agonía.

AMANECER

Golpeado por las leyes del destino
en tu infalible solidez hoy me refugio.
Llegan volando lluvias de silicio fino,
cae un océano de granizo sucio.
 
Afuera el crujido de la anacrónica ciudad
lanza chispidos encendidos
que se clavan, cual abrojos,
en la piel, con voluptuosidad
 
Por dentro las arañas y serpientes
sin cesar
hacen su avance cotidiano
en su afan de perdurar
 
¡y hay picadas en los frutos!,
el veneno se desliza,
como el vino de una misa,
lentamente, en la conciencia...
 
... alternando sus sabores brutos
y mi andar produce risa,
¡mis deseos tienen prisa!
y así caigo en la inconciencia.
 
¡Oh, mente, mente inquieta,
obstinada, turbulenta!
¡Tornado, huracanado,
tú trabajas por tu cuenta!
 
Sin embargo tengo en la reyerta
un aliado inconquistable: son mis cuentas,
donde rezo cada día en mi rosario
con un mantra que al tornado y al miedo ahuyentan.

 
Las bocinas se convierten en jilgueros
y el motor y la nafta en elefantes;
propagandas se hacen humo en la fogata
¡y las arañas se las toman por la puerta!
 
Vengo a ti, hogar de santos, como un cabo
cuando llega al campamento, herida abierta,
por las flechas de salvajes enemigos,
¡y el camino está inundado de piel muerta!
 
¡Hoy te pido, Krishna hermano, que me trates,
como un amigo a otro amigo perdido!
No te quiero Dios omnipotente,
amo justo, equilibrado y transparente.
 
¡Suena incordio, arrogante y prepotente
que te pida que me cuides como a un niño!,
mas cobijame con vendas y frazadas,
medicinas, una dieta y la receta...
 
...con la cual pueda desde hoy, ¡mañana!
levantarme temprano por la mañana
pa´ curarme, pa´ volver a la pelea...
 
... usaré tu mantra como espada,
y como escudo a la atención siempre despierta.
No quiero caer bajo las garras
de la agonía, de la obsesión, de la tristeza.
 
Soy tuyo,
Aunque mi corazón se cierra;
que la flor de la bondad
amanezca a su primavera.
 

CAVILANDO EN LA ROTONDA

Al paso va, el caballo,
coceando en su camino.
 
Y cuando iba pa’l norte
ya cansado,
con el viento zonda en contra,
arañando los cascotes:
 
Llega el zaino
sin buscarlo,
bien de pronto,
a una rotonda.
 
Ve las huellas de las rutas
el jinete desde lo alto;
piensa en alto y para adentro:
 
me he quedado confundido;
iba firme en mi camino,
a pesar que era sufriendo;
 
pero ahora encuentro en cambio
tres senderos diferentes
que marean a mi mente
 
Veo al este cielo oscuro;
una tormenta atrayente,
buen beber para mi sed caliente
 
Y un paisaje muy hermoso,
colinas, hierbas frescas, y canto’e gallos,
de cucús y papagallos.
 
Las nubes vienen cargadas;
sería un chaparrón inteminable.
 
En la entrada hay policías, que quizás
harían mi ruta infranqueable.
Placeres y peligros se vislumbran;
posiblemente no me sean muy amables,
 
mas si paso con aplomo y gallardía,
-si Dios quiere, pues Él premia a su valía-
(y si no me tienta el verde)
 
al final me encontraría
-sin dudarlo, mis amigos-
¡con el dulce oro de la vida!
 
Por el oeste, se ve un camino, seco,
firme, seguro y abierto;
la razón y la intuición dicen:
“pasad, no perdáis esta oportunidad”
 
Se ven ríos, cada tanto, en la ruta,
y se anuncian un buen clima pa’este lao.
Sería una tranquila travesía,
con lluvias, lagunas, flores y prados
 
Tal vez sea algo triste la aventura,
y haya que trotar más que despacio...
si no se pierde la fe en el destino:
veo libertad tras el camino.
 
Al norte iba yo, sin preguntarme,
si habría otra ruta en el camino.
El viaje venía siendo muy calloso,
sin verdes, con lagos, con pozos.
 
Al norte sólo veo desierto,
y mi caballo está anclao de sediento.
 
Ni se sabe qué hay tras el mar de arena
y el agua que se busca:
mas bien parece espejismo.
 
Si se pasa, por milagro, ese desierto,
con ayuda de la fe, una amigo y mucho tiento
¿habrá al fin un buen paraje
para darle a este caballo abrevaje?
 
Si así fuera
¡qué valiente valentía
haber seguido por este norte cansino!
 
Pues estaría abierta la puerta
para ir al galope hacia la meta
de Vrindavan, ¡la tierra despierta!
 
Hoy me encuentro cavilando en la rotonda,
esperando un señuelo hacia algún lao.
 
Donde marque El Buen Dios su luz brillante,
irán este jinete y su caballo,
a cumplir su cometido en esta vida.

SUEÑO DE AMOR

¿Cómo es que el sueño de vivir
eternamente y ser feliz
sufrió la triple destrucción:
invasión, violación y muerte?

Sueño de amor
Sueño, sueño
Sueño de amor

Nada cambiará para ti, mi reina:
Los rayos del amor jamás se cierran
A un alma como tu, sincera y tierna,
Aunque un loco militar inunde tus tierras.

Fuerte de paz
Muerte inerte
Fuente de paz

Y el sueño vio la realidad:
Por fuera su cuerpo explotó
De su jaula el ave escapó

La noche de la destrucción
La luna alumbró como el sol
Y dio vida a tu sueño de amor.

Vida a tu sueño,
Vida a tu sueño
Vida a tu sueño de amor

UNIDOS DOS

Unidos dos, dos partes de un corazón:
son días de amor, amor.
Estrellas del cielo, son de oro; caen,
y nutren los árboles de mi: de tu vitalidad.

Unidos dos,
dos partes de un corazón;
unidos dos…

A sentir, amor: a vivirlo.
Gopal es un niño azulado
que vino a crecer
en el centro de nuestro amor.

El tiempo, vuela, largo, fino;
y aunque es ciego sabe perforar
los canales del amor
que hemos tapado de temor;
cambia el viento…

¡Mirad, nuestros besos; son gigantes!
En silencio, grita nuestro amor.
¡Escuchad los timbres que anuncian
la apertura del portal del corazón!

Mi mano en tu pecho,
tu mano en mi ser;
tu mano en mi pecho,
mi mano en tu ser

Y ahora abrimos un paraguas
de lunas de colores
donde dentro, vos y yo
nos refugiamos del dolor.

Unidos dos, son nuestros pechos:
dos partes, partes de un solo corazón.
Y en nuestro círculo lumínico creamos
un gran moisés de cintas de seda azul
y que allí dentro se abra la sorpresa:
llega Gopal, el niño que trae luz,
brotando de dentro de cada átomo
de nuestra unión de cuerpos de tul.

Unidos dos,
dos partes de un corazón;
unidos dos…

Mi mano en tu pecho,
tu mano en mi ser;
tu mano en mi pecho,
mi mano en tu ser

Unidos dos,
dos partes de un corazón;
unidos dos…

CUERPO, FUEGO y DESPUÉS

Yo vivo cuerpo, fuego y después
eternidad en la morada de Krishna,
un mundo de sensaciones,
de variados camaleones
en un sinfín de estaciones

Tuve el sueño de ser noble rey,
genio del swing, manantial de talentos;
viajero del mundo, galán del jet set,
pero al final llega el fuego y después,
¿qué paso con mi contento?

Imaginé con ser un buen pez,
uno más del cardumen siempre inspirando
a cada amigo a trabajar sin stress
pero al final llega el fuego y después...
¡el sufrimiento deja al pez tiritando!

Por eso vivo cuerpo, fuego y después,
eternidad en la morada de Krishna,
un mundo de sensaciones,
de variados camaleones
en un sinfín de estaciones

Pude haber sido un doctor del francés
guiando a mil madres a dar a luz a sus hijos,
cultivar un hogar con sencillez
pero al final llega el fuego y después
¡quedan mis huesos en un escondrijo!

Una parte de mi quiso con fuerza ser
ser solidario pa´ los que tienen prisas,
ser un bastón pa’l que no puede ver,
pero al final llega el fuego y después
la eternidad, ¿quién me la garantiza?

Conocí a los que viven con fe,
no tienen miedo ni al odio ni al fuego;
son alegres y te enseñan a ver
que al final llega el fuego y después
¡te das cuenta que tu vida era un juego!

Por eso vivo cuerpo, fuego y después,
eternidad en la morada de Krishna
un mundo de sensaciones,
de variados camaleones
en un sinfín de estaciones

SUFRIENDO EN SEPARACIÓN

Estás en mi corazón
mas no se contemplarte

Tú eres mi inspiración
mas no puedo escucharte

Me das luz y calor
mas no quiero mirarte

Calmas mi sed, mi dolor
mas no quiero adorarte

Haces girar el reloj
mas no quiero esperarte

Sos la fuerza del motor
mas no quiero acoplarme

Eres el símbolo del amor
mas no puedo amarte

Tu nombre es la vibración
mas no quiero cantarte

Tú sabes dar protección
mas no puedo entregarme

Tu aroma es del alcanfor
mas no puedo abrazarte

Los niños tienen tu don
mas no quiero cuidarte

Tu cuerpo es como una flor
mas no llego a tocarte

La danza es tu creación
mas no entiendo tu arte

Tú ejerces total control
mas yo quiero desafiarte

Me escribes esta canción
mas yo quiero robarte

y aquí estoy, solo,
sufriendo en separación,llorando por todas partes.

BRILLANTE Y ESENCIAL

Rico no soy, ni pobre desquiciado,
ni carpintero, senador, ni intelectual;
no soy langosta que manduca en los trigales,
ni una espiga de la cual se brota el pan.

No soy francés, tailandés ni argentino,
ni un uruguayo que se mandó a mudar;
no soy galante bravucón marinerito,
ni una coqueta damisela magistral.

No soy enfermo de HIV ni de leucemia,
no vibro histeria ni maremoto mental;
no tengo cascos, cola larga ni rabo,
no soy demonio ni un angel celestial.

No tengo fecha de vejez ni nacimiento,
de vencimiento, de muerte ni enfermedad,
no me molestan ni las dagas ni cuchillos,
yo no tirito ni ante el frío ni ante el mal.

No necesito café, alcohol ni drogas
para ponerme esta noche a bailar;
ni vos tampoco, está bien, soltate un poco
no seas tímida, dejate llevar.

Yo soy un alma, loca, juname sin tus ojos,
soy invisible, brillante y esencial;
si mi mirada ilumina tu sonrisa
es porque soy un habitante espiritual

Vos sos un alma, loca, junate sin tus ojos
sos invisible, brillante y esencial;
si tu sonrisa derrite mi cariño
es porque sos un habitante espiritual.

La delicia de tu rostro maravilla;
mas si tú -¡alma!- ¡volaras de tu silla!
¡tu cadaver quedaría cubierto en mantos!
¿cuánto habría en tu sonrisa de tu encanto?

El brillo de tu alma
se escapa de tu ombligo;
la esencia de tu aroma
no está en los intestinos;
la estrella más bella
está en tu corazón

Esta belleza encandilante que ahora tienes
viene, va y viene; viene, va y viene; viene, va y viene;
es un reflejo (una luna sobre el río)
del Bello Krishna, que es eterno, tuyo y mío.

Fuente del agua y el sol

Es hora de ir al campo,
me voy
del humo ya estoy harto,
me voy
pues quiero conocerte,
a Tí,
que eres transparente.

Ya no quiero ir al cine,
me voy,
ni al super ni al boliche,
me voy,
violetas son mi musa,
adios mente confusa.

Fuente del agua y el sol,
paz inmaculada,
tus ojos de loto.

Cansado de estar solo,
me voy,
en medio de millones,
me voy,
hoy busco tres amigos,
que estén siempre conmigo.

Allí donde está el trigo,
me voy,
magnolias y alcanfores,
me voy,
no es obra del humano,
por eso es bello y sano.

Fuente del agua y el sol,
paz inmaculada,
tus ojos de loto.

Cantarle al que está en todo;
esa será mi tarea.
Contarles a los que quedan
que existe un mundo sin niebla.
Llevármelos de paseo
y mostrarles su forma eterna.

Fuente del agua y el sol,
paz inmaculada,
tus ojos de loto.

EN BUSQUEDA DEL DORADO

Aquí queremos honrar
a un sabio tan bondadoso
que tuvo el gesto amoroso
de alumbrar con su mirada
este campo tan fangoso:
¡viva Srila Prabhupada!

Más de un siglo atrás nacía
este santo de primera;
y tras una larga espera
al fin completó su hazaña:
quebrar todas las fronteras
con la luz del gran Caitanya.

¡Ay de ti, pobre planeta!
¡la gente está como loca
buscando guita, sexo y coca!,
(y también tranquilidad…)
Pero ¡cruda es la verdad:
todo el mundo se desboca!

Swami Srila Prabhupada
reveló un conocimiento
tan brillante no les miento
que cualquiera que lo quiera
cambiará su vida entera
y aquí nadie queda exento.

Lo que el Swami nos mostró
es la cara luminosa
de una moneda valiosa
que lleva del otro lado
el mito de la preciosa
ciudad perdida de El Dorado

¡Y toda la sociedad
anda en búsqueda de El Dorado
ansiando oro apilado
sin conocer que la ganga
es el regalo cantado
que trajo el Señor Gauranga!

Quinientos años atrás
la Tierra se estremeció
y en Europa se creyó
que allá por las Indias había
un mundo de fantasía
y a buscarlo se lanzó.

Lo cierto es que aquella vez
no pudieron hallar nada:
no intuyeron la bajada
refulgente y salvadora
-bailaora y cantaora-
del Señor de Su morada.

Tras su piel de color oro
Clara y pura como el sol,
Krishna –Dios- apareció,
Y en el cuerpo de un devoto
Le enseñó a la población
El aroma de los lotos.

Prabhupada fue tan fiel
al legado sin igual
a este dorado avatar
que esta tarde en su memoria
¡y para que aumente su gloria!,
nos pondremos a cantar...

Hare Krishna Hare Krishna
Krishna Krishna Hare Hare
Hare Rama Hare Rama
Rama Rama Hare Hare

INVOCACION

Como una hormiga colorada
tratando de montar un elefante;
o una avispa perturbada
queriendo controlar el viento errante...

como una niña ilusionada
con comprar con dos monedas un diamante;
o una mosca preocupada
por del sol apagar su luz brillante...

asi yo, con mi cara descarada
pretendo, -mirenmé, ¡ay, qué pedante!-
escribir y describir como si nada
quién es Krishna y enseñarlo al ignorante.

Por favor, yo les pido, camaradas,
sean pacientes, sean tolerantes.
Tal vez algún día Prabhupada
manifieste la verdad a este farsante.